Tiene un tamaño corporal medio, alcanzando los 14 cm. de longitud. Su cuerpo es ovoide aguzado hacia la cabeza. Las patas traseras son largas adaptadas para el salto. Poseen una coloración olivácea, a veces con tintes verdosos o amarronados, decorada con grandes manchas negras oceladas sobre el lomo. Ocho pliegues longitudinales no muy prominentes quitan monotonía a la superficie dorsal, húmeda y viscosa, gracias a la riqueza glandular cutánea que permiten al animal escurrirse paulatinamente por entre los dedos de sus presuntos captores. El macho es más robusto que la hembra y presenta una complexión muscular atlética en el pecho y en los brazos. Posee una mancha grande en el codo y callosidades especiales a nivel del pulgar durante el celo.
Habita prácticamente en todo Sudamérica templado y neotropical, en cuerpos de agua y pastizales cercanos a los mismos.
Durante las noches de verano, después de las lluvias, el macho comienza su cortejo eligiendo un lugar de escasa profundidad, de no más de 30 cm, y agitando las patas provoca la formación de espuma a manera de nido. Luego llama a la hembra con un gemido sordo y repetido. Al producirse el amplexo (abrazo que se produce durante la cópula), el macho y su compañera descargan los espermatozoides y óvulos respectivamente, produciéndose la fecundación fuera del cuerpo de la hembra.Al cabo de un tiempo eclosionan de los huevos varios renacuajos de color negro.
Cuando llegan a adultos se convierten en ranas activas y vigorosas que se alimentan de pequeños vertebrados y artrópodos.A pesar de no ser considerada una especie amenazada, los ejemplares muy pocas veces llegan a adulto, debido a que son muy apreciados por su carne.
Es una especie no amenazada según la AHA (Asociación Herpetológica Argentina).
Material extraído de:
- Anfibios del Centro de la Argentina, Javier Heredia, -1a ed.- Buenos Aires: L.O.L.A., 2008.
- Sistema de Información de Biodiversidad www.sib.gov.ar
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